Fotos: https://khantymansiysk2019.fide.com/en/
Dos tablas tras masivos intercambios de piezas
KHANTY-MANSIYSK, Rusia, 26 de septiembre._ Más que por falta de combatividad, al parecer el cansancio por la extenuante y dramática jornada de ayer dio hoy paso a dos rápidos empates, a manera de reposo, al arrancar las semifinales en la Copa Mundial de Ajedrez.
Tempraneros y masivos intercambios de piezas mostraron sin asomo de duda que el espíritu de lucha de los combatientes del tablero no estaba en su punto más alto.
Tan es así que los chinos Ding Liren y Yu Yangyi firmaron el armisticio, por repetición de jugadas, en apenas 27 lances de una apertura Inglesa. Nueve saltos de caballo, uno albo y otro negro como el azabache, precedieron a la firma de la división del punto.
Un poco más largo, 31 movimientos en total, fue el encuentro entre el francés Maxime Vachier-Lagrave y el azerí Teimour Radjabov, dos ex niños prodigio que, como ya dijimos antes, lograron a los 14 años el título de gran maestro.
El galo llevó las blancas y abrió el juego con peón de rey, a lo que las negras respondieron con la defensa Siciliana. Ya desde el tercer movimiento comenzó el intercambio de trebejos, que fue simplificando rápidamente la posición hasta llegar a un final muy equilibrado de peones y piezas menores, alfil y caballo por cada jugador.
Pese a esos resultados, pocos osarían hablar de falta de combatividad después de los sucesos de ayer en los cuartos de final, que muchos tardarán en olvidar. No es para menos. Por culpa del ruso Nikita Vitiugov, o más bien gracias a su rival Yu Yangyi, como se le quiera ver, en adelante mucha más gente seguirá peleando una batalla por más perdida que esté su posición en el tablero. Y sobre todo si se está disputando una partida de ajedrez relámpago, ya no digamos un “Armagedón”.
Y los entrenadores pondrán ese duelo como ejemplo de que no se debe bajar la guardia por mucha ventaja que se tenga sobre la palestra cuadriculada. Después de todo, como alguien ha dicho, “la partida más difícil de ganar es una partida ganada”.